Recorrió la población El Boro donde destacó el grave problema ambiental que afecta a los vecinos. Además, se reunió con el notario local para afinar detalles del proceso de inscripción de firmas para el Partido Progresista.
Durante su paso por la región de Tarapacá, el presidente del PRO fue invitado por dirigentes de la población El Boro de Alto Hospicio para interiorizarse sobre los graves problemas ambientales que afectan a los habitantes del lugar. Esto luego de que se instalara un vertedero y una planta de tratamiento de aguas servidas a metros de las viviendas.
“Estamos frente a una negligencia que se repite dramáticamente con los más pobres de nuestro país, quienes son relegados a vivir en terrenos que, al parecer, no tienen control de las autoridades sobre su calidad. El criterio que prima aquí en Alto Hospicio se repite también en la Población Los Industriales de Arica, donde miles de personas viven sobre plomo. Esperamos que el gobierno sea parte de la solución cuanto antes para que la vida de estas personas vuelva a tener condiciones dignas”.
La población El Boro de Alto Hospicio debe convivir a diario con los malos olores y las plagas de insectos y animales provocadas por un vertedero ubicado a menos de 500 metros y una planta de tratamiento de aguas servidas. La situación se mantiene pese a que las autoridades ya habrían firmado acuerdos para el cierre del vertedero en un plazo máximo de 3 años y mejoras en la calidad de la planta de tratamiento para marzo de 2011.
“Si bien los plazos que se acordaron entre las autoridades regionales y los empresarios son un avance, estos son aún muy precarios respecto a la realidad que día a día viven estas personas. Desde el Partido Progresista hacemos un llamado a que tanto el gobierno regional como las municipalidades involucradas se pongan una mano en el corazón y actúen con la máxima rapidez y con profunda ética para que esto se solucione ya”.
La visita de Enríquez-Ominami se enmarca en el proceso de legalización del Partido Progresista, el que debe reunir las firmas del 0,5 % de los electores que sufragaron en la última elección a diputados en cada una de las regiones del país. Las firmas de afiliación deben ser legalizadas en las notarias habilitadas para dicho fin o bien, en los registros civiles de aquellas ciudades que no cuenten con una notaría. Este trabajo es apoyado en terreno por miles de adherentes en cada zona del país. En Alto Hospicio, el proceso comenzará antes del fin de agosto en la notaría José Luis Ayala.
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